lunes, 5 de septiembre de 2011

Opinión de Josep Anglada sobre la reforma de la Carta Magna

Este blog no es oficial.

Imagen, paella en casa del concejal de PxC en Mediona, Eduard Farré

En el transcurso de una jornada en Mediona (Alt Penedès, Barcelona), en la que Anglada dió su acostumbrado paseo por la población, palpando su pulso y charlando con sus habitantes, tal como suele hacer siempre en sus actos, expresó su opinión sobre la reforma anti-constitucional.

El presidente de PxC, criticó no sólo la forma, sino también el fondo de esta reforma señalando que “es una genuflexión de nuestros políticos ante la presión de los gobiernos liberales de Alemania y Francia y de los mercados internacionales. Una nueva cesión de soberanía política en beneficio de los especuladores financieros”. Para Anglada, “esta reforma castrará las posibilidades de actuar de forma soberana ante la crisis pues la casta política usará el argumento de no poder actuar sobre la política monetaria para crear empleo por haberla cedido al BCE; ni tampoco de usar la política fiscal al estar prohibido por la nueva ley, con lo que pretenderán que para la creación de nuevo empleo sólo les queda una opción: bajar los salarios y empeorar las condiciones laborales. Y éste es precisamente el objetivo del capitalismo neoliberal globalizador: bajar los salarios y destruir el Estado social”.

La inutilidad de esta reforma también ha sido puesta de manifiesto por Josep Anglada afirmando que “creará más desempleo en los próximos años porque contribuirá a disminuir el gasto público y con él la demanda agregada, y con ésta la actividad económica”. Línea argumental que corroboran varios premios Nobel de Economía y el propio ex dirigente socialista Josep Borrell.

Anglada concluyó señalando que “todo esto no es más que la antesala de lo que nos espera si el PP gana las próximas elecciones. Por eso no puede haber ni un voto trabajador, ni un voto de los pequeños o medianos empresarios para el partido que representa los intereses antinacionales de los mercados y la especulación internacional, culpables de la génesis de la crisis actual”.